Las mochilas escolares con ruedas se han hecho muy populares entre los escolares en los últimos años. Según los niños, son elegantes, prácticas y, lo más importante, no tienen que cargar con pesados libros y material escolar a la espalda. Sin embargo, los expertos advierten de que los aspectos negativos de estas mochilas superan con creces a los positivos. Entonces, ¿comprar o no a un niño una mochila con ruedas?
Las mochilas escolares con ruedas, que muchos confunden con maletas, son todo un éxito entre los alumnos de primaria y secundaria. ¿Tienen incluso un motivo de un cuento favorito o un personaje de cómic preferido? Eso sí que es un premio. Las mochilas con ruedas son cada vez más populares entre los niños, pero antes de comprarlas, los padres deben pensar si son realmente la opción adecuada.
Una mochila para el colegio no es una maleta
No en vano existen en el mercado mochilas escolares para cargar en hombros y maletas con ruedas. Cada una de estas bolsas tiene su propia función y se utiliza para fines distintos. Desde el punto de vista de los niños, es lógico que no quieran llevar una bolsa a la espalda todo el día y les resulte más fácil arrastrar esta "carga" como si fuera una maleta. Aparte del aspecto de tendencia de moda, aquí es donde empiezan, pero también acaban, los aspectos positivos de una mochila escolar con ruedas.
La marca belga Jeune Premier solía ofrecer este tipo de mochilas. La respuesta a la pregunta de por qué ya no se puede comprar una mochila con ruedas con su logotipo era sencilla:
"Antes ofrecíamos mochilas con ruedas, pero ya no las fabricamos. En Jeune Premier, no nos preocupamos solo por el aspecto y la belleza (aunque, por supuesto, esto es muy importante), sino también por la ergonomía. Para la columna vertebral de un niño, es mejor comprar una mochila que se adapte a la altura del niño que una maleta que los niños arrastran detrás de ellos y que luego tienen que subir por las escaleras. Por esta razón, ya no incluimos mochilas con ruedas en nuestra colección".
explica Lore Luyens, Jefa de Producto de Jeune Premier.
La columna vertebral es como un cuenco de báscula
Las mochilas con ruedas solo son prácticas cuando los niños tiran de ellas por detrás o las empujan por delante. Sin embargo, si el niño está acostumbrado a tirar de la mochila escolar con una sola mano, con el tiempo esta manipulación provocará una distribución desigual de las fuerzas a ambos lados de la columna vertebral. En la práctica, esto se traduce en curvatura de la columna, escoliosis y otras dificultades que los niños arrastrarán el resto de su vida.
Ambos lados de la columna vertebral son como una balanza. Si solo se utiliza un lado, la columna vertebral solo se curvará hacia un lado a largo plazo. En la infancia, y por tanto también en la edad escolar, el sistema de soporte y el esqueleto aún se están desarrollando, la columna vertebral es "blanda" en este sentido, por lo que hay que tener cuidado de que la carga sea uniforme. Una mochila es la mejor opción en este caso, pero debe llevarse sobre los dos hombros.
Sin embargo, tampoco las mochilas deben ser demasiado pesadas, algo que a menudo olvidan no solo los padres, sino también los profesores. Independientemente de la calidad de la mochila o maletín escolar, no debe superar el peso recomendado, que se basa en el peso del alumno. Aunque los niños pueden colgarse al hombro mochilas escolares con ruedas, esto añade un peso innecesario. La construcción de este tipo de "maletín" escolar pesa algo, por no mencionar el hecho de que las grandes ruedas suelen golpear a los niños en la columna vertebral y causarles lesiones.
Una mochila escolar con ruedas es muy práctica y cómoda para viajar, pero no debe sustituir totalmente a las mochilas y maletines escolares tradicionales. Es pesada, a menudo incómoda por su tamaño y construcción y difícil de manejar. Los niños tienen que subir varios tramos de escaleras a lo largo de una jornada escolar, no solo en el colegio, sino también en el autobús, donde una bolsa así es un obstáculo. También causa problemas en los pasillos de la escuela, donde otros alumnos tropiezan con ella porque sencillamente no la ven con sus prisas.
¿Cómo elegir una mochila escolar adecuada?
Elegir la mochila escolar adecuada es una ciencia. No es una ciencia exacta, pero sí lo es. Una mochila escolar debe cumplir varios criterios y ambas partes -niño y padres- deben estar de acuerdo. Al fin y al cabo, la mochila, quieras o no, es un complemento de moda además de un accesorio escolar esencial, y los niños la utilizan para presentar su personalidad y su estilo. He aquí las reglas de oro que hay que seguir a la hora de comprar una mochila escolar:
- Tamaño adecuado: La primera regla, en la inmensa mayoría de los casos, no la cumplen las mochilas escolares con ruedas. La regla es que una mochila o maletín escolar no debe llegar por debajo de la cintura del niño. Lo ideal es que termine por encima o a la altura de la cintura. La mochila no debe tocar las nalgas y, desde luego, no debe llegar a los muslos del alumno.
- Peso de la mochila: El peso de la bolsa va unido al tamaño. Cuanto más grande, más pesada. La regla de oro dice que una mochila escolar no debe superar el 15% del peso total del niño. En la práctica, esto significa que un escolar de 27 kg no debe llevar una bolsa de más de 4 kg sobre los hombros, y un niño de 45 kg no debe llevar una mochila de más de 7 kg.
- Correas anchas y acolchadas: las correas anchas y suaves garantizan la comodidad al llevar la bolsa y protegen los hombros de una tensión excesiva. Sin embargo, es importante que los niños lleven la bolsa correctamente, es decir, sobre ambos hombros, y que las correas estén adaptadas a la altura del niño. Así se reduce la tensión, el peso se distribuye adecuadamente por la columna vertebral y la bolsa no vuela de un lado a otro al andar o correr.
- Correas para el pecho y la cadera: Algunas mochilas y maletines tienen correas adicionales para el pecho y la cadera. Asegúrate de que también estén correctamente ajustadas y no corten ni restrinjan a los niños cuando estén abrochadas. Cuando estén abrochadas, las correas del pecho no deben restringir el movimiento de los niños, y mucho menos su respiración, y el cinturón de la cadera debe estar a la altura de las caderas.
- Bolsillos y compartimentos: El interior de la mochila también es muy importante y no se debe olvidar a la hora de comprarla. Una mochila escolar debe tener más de un compartimento, y los bolsillos laterales y delanteros para objetos pequeños son sin duda útiles. Echa un vistazo al interior de la mochila y valora si es adecuada para tu hijo. Por regla general, los objetos pesados, como libros de texto y cuadernos, deben colocarse más cerca de la espalda, mientras que los más ligeros pueden guardarse en los bolsillos delanteros y laterales.