Por fin has llegado al punto en que tu bebé duerme casi toda la noche... ¿y de un día para otro todo cambia? Es posible que se trate de una regresión del sueño, una etapa que afecta negativamente al descanso del bebé y hace que retroceda en sus progresos. No te preocupes: la regresión del sueño en los niños no dura para siempre, aunque sí puede traer consigo algunas noches difíciles y lágrimas.
El sueño del bebé es un capítulo aparte. Es irregular e interrumpido, pero aun así, los padres suelen adaptarse a ese ritmo. ¿Por qué entonces a veces parece que el patrón de sueño de tu hijo da un giro de 180 grados? Ese deterioro repentino y notable del sueño se conoce como regresión del sueño, que puede “romper” la rutina previamente establecida.
Las regresiones del sueño pueden aparecer en diferentes etapas, no solo en los primeros meses de vida. Incluso un niño de dos años que ya dormía toda la noche puede comenzar a despertarse con frecuencia. A esta regresión de los 24 meses también se le llama regresión del sueño en la etapa de niño pequeño. Por supuesto, la primera regresión puede aparecer mucho antes, durante la etapa de lactante; en ese caso hablamos de regresión del sueño en lactantes.
¿Qué causa la regresión del sueño?
Hay varios factores que pueden contribuir a un deterioro repentino del sueño en los niños. Las causas más comunes son:
- desarrollo del sistema nervioso (la regresión del sueño a los 4 meses suele deberse a la maduración neuroevolutiva)
- condiciones del entorno al dormir
- necesidad de ajustar la rutina de sueño
- enfermedades
- dentición
- viajes
- logros del desarrollo (gatear, sentarse, caminar…)
- cambios en la rutina diaria
- cambios en la vida familiar (mudanza, nacimiento de un hermano, divorcio, adopción de una mascota…)
Comprender la causa detrás de la regresión del sueño es clave para poder manejarla adecuadamente. Un niño que no duerme bien por estar enfermo volverá a dormir mejor una vez se recupere. En cambio, un bebé que atraviesa una etapa de desarrollo intenso, alcanzando nuevos hitos uno tras otro, puede verse más afectado por la regresión, que además puede durar más tiempo.
¿Cómo saber si tu bebé está pasando por una regresión del sueño? La regresión puede afectar tanto al sueño nocturno como a las siestas. Por la noche pueden aparecer dificultades para dormirse, despertares frecuentes y despertares muy tempranos por la mañana. Durante el día, las siestas pueden hacerse más cortas o el niño puede empezar a rechazarlas por completo.
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Varios períodos críticos
La regresión del sueño suele aparecer en momentos específicos del desarrollo, y con mayor frecuencia se puede observar en cinco etapas tras el nacimiento del bebé.
Regresión del sueño a los 3 meses
Alrededor de los tres meses, la estructura del sueño del bebé experimenta un cambio significativo. Se trata de una transformación biológica que puede afectar los patrones de sueño y alterar el horario previamente establecido del pequeño.
Regresión del sueño a los 4 meses
Entre los 3 y 4 meses, el sueño del bebé "madura". De repente, empieza a dormir en ciclos, como lo hacen los adultos. Este cambio en el desarrollo afecta naturalmente el sueño, aunque también influye la forma en que el bebé se duerme. Si ya ha aprendido a conciliar el sueño por sí solo, sin ayuda de los padres, esta transformación tendrá poco impacto en su descanso. Cuando se despierte durante la noche, probablemente podrá volver a dormirse sin necesidad de compañía.
Sin embargo, es más probable que el bebé de cuatro meses aún dependa de rutinas como alimentación, arrullo o canciones de cuna para dormir. En ese caso, es probable que la regresión provoque un aumento en los despertares nocturnos. Por supuesto, no se trata de una norma que se aplique a todos los bebés: algunos pueden no experimentar ninguna regresión del sueño en esta etapa.
Regresión del sueño a los 8 meses
Entre los 7 y 10 meses, comienzan a salir los primeros dientes, y el sueño empieza a dividirse en dos fases principales. En esta etapa, también se acentúa la ansiedad por separación, que puede tener un impacto negativo considerable en el descanso. Bebés que antes se dormían tranquilos y rápidamente, pueden empezar a despertarse llorando y buscando la presencia de sus padres.
La regresión del sueño a los 8 meses es muy común y suele conllevar cambios en la rutina del sueño. Se manifiesta a través de dificultades para dormir y despertares frecuentes. A esta edad, los patrones de sueño evolucionan de forma natural, lo que puede acortar las siestas diurnas e incluso hacer que el bebé rechace una de ellas.
Regresión del sueño a los 18 meses
En torno al año y medio, los niños alcanzan nuevos hitos que suelen derivar en una regresión del sueño. El descanso diurno vuelve a cambiar y se estabiliza en una sola siesta por la tarde, lo que puede provocar una mayor fatiga. Los niños de entre 14 y 18 meses comienzan a probar sus propios límites y descubren su independencia. La palabra "no" se convierte en una de sus favoritas, y el rechazo también se extiende a la hora de dormir. En esta etapa, muchos niños se vuelven especialmente persistentes y tercos a la hora de evitar el sueño.
Regresión del sueño a los 2 años
Los padres de niños de dos años suelen preocuparse por el sueño interrumpido y por las siestas durante el día. A esta edad, los pequeños necesitan un mayor tiempo de vigilia antes de poder dormirse bien. En la práctica, esto significa que si se les acuesta demasiado pronto, es probable que no tengan sueño y terminen sin dormir en absoluto.
Si a tu hijo de dos años le cuesta más quedarse dormido, intenta ampliar el tiempo que permanece despierto y acuéstate un poco más tarde. Este pequeño ajuste puede ayudar a mejorar el sueño. Puedes encontrar más información sobre el tiempo de vigilia y su importancia en otro de nuestros artículos.
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Consejos prácticos para afrontar la regresión del sueño
Si tu bebé o niño pequeño duerme bien y sin mayores dificultades, no es necesario alarmarse de inmediato. La regresión del sueño no es una fase que todos los niños deban experimentar. Pero, ¿qué hacer si tu pequeño entra en esta etapa?
No existe una forma de prevenir la regresión del sueño. Aparece sin previo aviso y, con frecuencia, desaparece de la misma forma. Afortunadamente, hay varios consejos comprobados que pueden ayudarte a sobrellevar esta situación.
- Revisa el sueño diurno. El desarrollo infantil está estrechamente vinculado a la evolución del sueño y a la necesidad de ajustar los horarios. Las dificultades asociadas a la regresión del sueño pueden deberse a un número inadecuado de siestas. A medida que los niños crecen, su necesidad de sueño durante el día disminuye. Mientras que un recién nacido puede necesitar hasta seis siestas diarias, un niño de un año puede arreglárselas con solo dos descansos al día.
- Establece una rutina adecuada. Ya hemos mencionado que las necesidades de los niños cambian rápidamente. Es recomendable que sigan un horario de sueño apropiado para su edad, pero también hay que tener en cuenta sus necesidades individuales. Determinar los momentos adecuados para dormir puede prevenir muchas dificultades. Aprende a reconocer las señales de cansancio, como bostezos, irritabilidad, llanto, frotarse los ojos o la pérdida de interés en las personas (padres, hermanos...) o actividades.
- Ármate de paciencia. No te desanimes si los primeros intentos no funcionan. Dale tiempo al niño para que se adapte a los cambios. No le obligues a dormir cuando lo rechace claramente, pero tampoco lo despiertes a la fuerza solo porque hace un mes a esta hora ya estaba jugando alegremente.
- Modifica las expectativas del niño. Durante las regresiones del sueño, muchos niños buscan la presencia constante de sus padres. Por ejemplo, si el niño se despierta por la noche y no puede volver a dormirse sin ayuda, a pesar de que antes sí lo lograba solo, los expertos recomiendan “reiniciar” sus expectativas. Es decir, ayudarle a dormir sin tu presencia. Siempre que la regresión esté provocada por hitos del desarrollo y no por enfermedad o dentición, la fase debería durar solo unos días.
- Busca ayuda profesional. ¿Sientes que la regresión del sueño de tu pequeño se está prolongando demasiado? Acude con él al pediatra y cuéntale sobre los problemas relacionados con el sueño. Estas dificultades pueden ser señal de alguna enfermedad subyacente, pero también podrían estar causadas por otros factores desencadenantes como el trauma o el estrés.
Fuente:
- Understanding and Navigating Sleep Regressions. Online. In: Penn Medicine Lancaster General Health. Disponible en: https://www.lancastergeneralhealth.org/health-hub-home/motherhood/the-first-year/understanding-and-navigating-sleep-regressions.
- Amber LoRe. Baby sleep regression ages: Causes, charts, months. Online. In: Huckleberry Labs. 2024. Disponible en: https://huckleberrycare.com/blog/navigate-sleep-regressions-and-pattern-shifts-like-a-pro.
- Colleen de Bellefonds. What Is Sleep Regression? Online. In: What To Expect. 2024. Disponible en: https://www.whattoexpect.com/first-year/sleep/sleep-regression/.